Palabras ajenas

Es impresionante como en este mundo en el que vivimos de páginas de chat, sitios social, globalización total, integración de la comunicación y mensajes de textos, no podamos tener acceso a hecho claros y concisos.

No importa lo que suceda, cada acontecimiento en este país es mostrado de dos manera. Como lo ven los masistas y como lo ven los autonomistas.

Sin importar lo que sea, sin fijarse de donde vienen las balas, una lado dice que el otro tiene la culpa. Ahora, yo podría en este momento ponerme a putear sobre la mala información que recibimos constantemente, pero creo que es mejor ir a la base.

Si tomamos en cuenta que estos dos grupos no tienen ningún elemento certero que les diga que lo que escuchan o ven en la tele sobre lo que sucede, sea positivo o negativo, es verdad, prefieren aferrarce a todo dar con lo positivo o lo solidario a su causa. Pareciera que nos hemos olvidado de vernos a nosotros cuando hacemos algo y nos hemos dedicado a justificar lo que hacemos a partir de lo que se nos dice o hace.

Yo estoy constantemente agobiado con comentarios como: "No podes hablar de eso" o "nada que ver que pensés así". Y al mismo tiempo soy testigo del manejo de masas sin la menor muestra de pruebas ni hechos claros.

Es decir, no puede ser que no hayan "hechos". Los masistas tienen sus "hechos". Los autonomistas tienen sus "hechos". Y parece que ya no hay "hechos hechos". Tiene que haber "hechos hechos", sino somo una manada de zombies siendo mandados ciegamente de un lado a otro sin la menor intención de recibir un simple "para qué...".

Y guarda, esto no es un ataque a un grupo o el otro. No estoy siendo capcioso, ni hablo de forma interpretable. Solo digo lo que veo y personalmente estoy cansado. Me encantaría tener la energía para hablar de cada suceso que nos rodea, pero mi mente me pide: "Por favor, no jodás".

Si fuera por mí daría mi opinión a diestra y siniestra pero me veo constantemente chocando con una pared que simboliza un pensamiento muy conocido. "¿De qué sirve?"